En la segunda parte del fin de temporada, sale a la luz el verdadero villano. Toda la ciudad está en peligro y nuestras chicas son su única esperanza. Deberán confiar en lo que han aprendido sobre cocina mágica para intentar romper la maldición más poderosa que Saffron Falls haya visto jamás. Pero hasta que no lo consiguen, no se dan cuenta de que algunas maldiciones no siempre han de romperse.