Para Seyran, las tensiones llegan a su punto límite y ella respira aliviada en la casa de Kazim. Cuando Halis Aga se entera de que Seyran ha dejado la casa, se enfurece mucho. Ifakat se siente satisfecha con este giro de los acontecimientos. Cuando Ferit se entera de la situación con Suna, su reacción es enfrentarse a Abidin, lo que provoca una discusión entre ambos. Mientras el plan de Ifakat avanza sin problemas, la insistencia de Seyran en no regresar a la mansión sigue siendo firme.