Las serenatas nacieron muchos siglos antes que nuestro país. Una de las más famosas es la que se dice interpretó el emperador Nerón con su lira mientras ardía Roma. En nuestro país tiene sabor a mariachi y a bolero, pero se ha visto enriquecida con grupos que interpretan otros ritmos. Quienes las brindan a sus parejas tienen, entonces, un buen espectro de sonidos para escoger, y sus intérpretes, una manera digna y dura de arrancarle algunos pesos a la noche.