Por culpa de su madre, alexia debe cambiar sus planes en el último momento. Alexia promete a Fernando y a sus hijos un fin de semana de ensueño fuera de Madrid. En cambio, el lugar paradisiaco ideado, muy poco se parece al entorno con el que se encuentran Ana y la familia. Aprovechando que los mayores pasan el fin de semana fuera, Nando y Fonti celebran una fiesta en casa. Calculan los invitados que van a acudir, y compran la bebida y la comida. Poco a poco, la casa se llena de gente y la fiesta se les acaba yendo de las manos.