Alan emprende uno de sus pleitos más escandalosos hasta la fecha cuando se une a Denny para demandar a la Guardia Nacional por no presentarse cuando una inundación arrasó un pequeño negocio. Shirley se sorprende cuando su nieta la visita en la oficina con la noticia de que fue expulsada de la universidad por destruir los exámenes de las normas del gobierno. Mientras tanto, Carl se replantea la idea de quedarse en Boston y Lorraine se sincera con la empresa sobre su verdadero origen.