Sandy y Danny han pasado un romántico y maravilloso verano juntos, pero las vacaciones se acabaron y sus caminos se separaron. Al regresar al instituto Rydell, ambos vuelven a encontrarse de manera sorpresiva, pero el problema es que la imagen y actitud de Danny no es la misma que durante el verano: ya no es el encantador y atento chico que encandiló a Sandy, sino alguien engreído e insensible que sólo quiere presumir de duro delante de sus amigos.