En un pueblo de Costa Rica, Isabel atiende todo el día la casa, a sus hijas y a su esposo, eso aprendió, y eso enseña a sus hijas. Isabel es buena madre, buena esposa, buena nuera. Cuando su familia política la presiona para tener otro hijo, el varón, una serie de revelaciones le llevan a enfrentarse consigo misma, su entorno y su familia. La costumbre, el calor, su larga cabellera, los insectos que invaden hasta los espacios más íntimos y la presión de su familia empiezan a torcer la imaginación de Isabel. A sus 30 años, siempre ha hecho lo que los demás esperan de ella. Isabel debe decidir si enfrentar o no a su familia.