Paul está casado con Sali. Todo sería perfecto si pudieran tener un hijo. Un día, Sali recibe la llamada que estaban esperando desde hace tanto tiempo: su expediente de adopción es aprobado. El niño es precioso, tiene 6 meses, se llama Benjamin, es rubio con ojos azules... y es blanco. Para la familia de Sali, de raza negra, esto supone un gran choque.