Un meteorito libera en el espacio a Gamera, que regresa a la Tierra con no muy buenas intenciones. Mientras, unos saqueadores encuentran en una cueva de Nueva Guinea una especie de ópalo que trasladan a Japón. La piedra resulta ser el huevo de una criatura prehistórica de enorme poder llamada Barugon, que tiene la capacidad de congelar todo lo que le rodea.