Cuatro presos conflictivos escapan de prisión. Asustados y sin ningún lugar donde ir, buscan refugio en el único lugar donde la policía no puede seguirles, un monasterio cisterciense, en el que nada es lo que parece. Aislados del resto del mundo, comienza una pesadilla entre los fugitivos, dispuestos a matar por proteger su libertad y los monjes que tienen como rehénes.