Las lluvias torrenciales han convertido la localidad de Huntingburg en un caos. Totalmente sumergida bajo el agua, la ciudad es evacuada por el sheriff. Lo que este no sabe, es que no lejos de allí, una banda de atracadores está planeando asaltar el furgón blindado que transporta la totalidad de los fondos locales y que también ha quedado atrapado por las aguas. A partir de ese momento se desarrolla una caza humana, en la que están implicados los atracadores, los conductores del furgón y una joven, cuya intención es salvar de la catástrofe la histórica Iglesia del lugar.