Tras 25 años trabajando en una cadena, el veterano presentador Howard Beale debe abandonar su puesto por el bajo nivel de audiencia. Su jefe y mejor amigo, Max Schumacher, le da dos semanas para despedirse de los espectadores. Beale, viudo y alcohólico, queda trastocado y decide anunciar durante una emisión que se suicidará en su último programa ante las cámaras. El hecho sin precedentes provoca una gran expectación y los propios compañeros tratarán de convertir la destrucción de este hombre en un negocio rentable.